Maestras panaderas de Huamanga: Preservando una herencia ancestral

En el corazón de Huamanga, un grupo de dedicadas maestras panaderas son guardianas de una tradición que ha perdurado a lo largo de los siglos como una manifestación cultural que conecta a las nuevas generaciones con sus raíces.

Las técnicas de panadería en Huamanga son un legado vivo, transmitido de generación en generación. Las maestras panaderas utilizan métodos tradicionales que incluyen el uso de hornos de barro, masas madre y fermentaciones naturales. Cada pan lleva consigo la historia y el sabor de tiempos pasados, mostrando la dedicación y el cuidado en cada paso del proceso que nuestros ancestros perfeccionaron.

Estas maestras panaderas provenientes de Huamanga, región Ayacucho, visitaron el Centro de Formación en Turismo (CENFOTUR), para revalorar el legado de la panadería artesanal de Huamanga que, con sabiduría y destreza, siguen siendo las guardianas de una tradición que endulza y enriquece la vida de quienes tienen el privilegio de saborear su herencia.

Las maestras panaderas no solo demostraron su habilidad y conocimiento en la elaboración de panes artesanales, como un elemento cultural, sino también su compromiso con la sostenibilidad y la innovación, asegurando que estas técnicas ancestrales sigan vivas y relevantes en el mundo moderno.

Esta actividad se realizó en el marco de la validación de los instrumentos de evaluación del perfil ocupacional de panadería artesanal, a través del Piloto de Competencias Laborales que desarrolló CENFOTUR, con la finalidad de verificar que los procesos establecidos en los instrumentos, estén acordes con las actividades que se realizan en la elaboración de panes artesanales en el contexto nacional.

Una de las representantes de esta técnica ancestral es la maestra panadera Madeleine Cárdenas, dedicada a la elaboración de los diversos panes de la región de Ayacucho, nos cuenta como se elaboraba antiguamente el pan de chapla. “El pan de chapla era elaborado con el concho de la chicha de jora y a la llegada de la levadura, se deja de usar ese fermento natural”.

“El pan chapla es muy conocido, pero también queremos destacar nuestro rol como gestoras del patrimonio panadero. Es la primera vez que venimos a Lima y agradecemos a CENFOTUR, por recibirnos en esta casa de estudios para participar en la mesa técnica sobre «Gestión del modelo de desarrollo sostenible de la panadería artesanal de Huamanga», actividad que nos permite dar a conocer y difundir nuestra labor en preservar las técnicas ancestrales de la panadería, en Ayacucho”.

La preservación de la panadería artesanal de Huamanga es un ejemplo inspirador de cómo las tradiciones pueden perdurar en un mundo en constante cambio. Las maestras panaderas, con su dedicación y pasión, nos enseñan que honrar nuestras raíces es una forma de construir un futuro más rico y diverso.